Fuente: Sol de Pando |
Llamó la atención que el nuevo Directorio de la AMB encabezado por la burgomaestre acreana, tiene una presencia dominantemente femenina, sólo un varón lo integra, el concejal de Tarija César Mentasti Padilla como Segundo Vicepresidente. Ejerce la Primera Vicepresidencia la concejal de Trinidad Martha Yáñez Hurtado; la concejal de Potosí Reyna Isabel Menacho asumió la Secretaría General; mientras la concejal de Oruro Nilda Fernández Calle y la munícipe de Sucre Yolanda Edith Barrios Villa son Primera y Segunda Vocal.
Para Ana Lucía Reis, presidir un Comité Ejecutivo con mayoría de mujeres es un signo de los nuevos tiempos que se avecinan en Bolivia, ante el reto de enfrentar una de las mayores crisis municipales que vive el país. “Ser mujer, viniendo además del municipio más joven y pequeño de la patria, y estar a la cabeza de una directiva con fuerte presencia femenina, es un desafío que acepté sabiendo que las mujeres debemos tomar nuestro rol en la vida nacional con la fuerza que da nuestra unión”, dijo Reis a Sol de Pando.
Ana Lucía es destacada lidereza integrante de la Asociación de Concejalas y Alcaldesas de Bolivia (ACOBOL), organización que la reconoció oficialmente como principal promotora de la Primera Cumbre de Alcaldesas de Bolivia, celebrada en la ciudad de El Alto en octubre del pasado año.
La extremadamente difícil situación que atraviesa la Alcaldía de Cobija, agravada por el despilfarro y malversaciones en la gestión de su antecesor, es otra razón que le llevó a Ana Lucía Reis aceptar la Presidencia de la AMB. “Lo que estamos sufriendo en Cobija, que es el municipio más vulnerable entre todas las capitales, se está sufriendo en todo el país en mayor o menor escala” —explica—. “Al constatar que casi todas las alcaldías de Bolivia ya no tienen capacidad de endeudamiento y soportan déficits sin precedentes, no nos será fácil resolver aisladamente nuestra crisis en Cobija, si no resolvemos el problema a nivel nacional”.
Según Reis, urge interpelar al Gobierno central para lograr nuevos mecanismos de fortalecimiento presupuestario y ampliar la capacidad de endeudamiento en todos los municipios del país. “En Cobija no tenemos plata ni para pagar el sueldo de la Alcaldesa, prácticamente el 80% de nuestros recursos se esfuma pagando deudas heredadas, arrastramos sueldos devengados de varios meses, y esto no lo vamos a resolver solos en Cobija. Somos parte de un grave problema nacional”, insistió en tono dramático pero firme.