Hasta el siglo XVII, las zanahorias NO eran de color naranja, sino moradas, amarillas y blancas.
Fue durante este período que los agricultores holandeses comenzaron a cruzar diferentes variedades de zanahorias, obteniendo así la variante naranja que conocemos hoy.
Este cambio de color fue en parte un acto simbólico, ya que los agricultores seleccionaron la variedad naranja como un homenaje a la Casa de Orange, la familia real de los Países Bajos.
Además, la zanahoria naranja fue favorecida por su sabor más dulce y su mayor resistencia al cultivo.
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