Fuente Edwar Ayma
Jimena, una mujer embarazada de 30 años que sufrió un brutal intento de feminicidio el 13 de julio en Cochabamba, salió de terapia intensiva y está mejor, pero necesita la ayuda de todos. Requiere pañales, fisioterapia, el medicamento Levetiracetam de 500 mg para evitar que sufra convulsiones y crema hidratante para la piel.
La historia de Jimena es muy triste. Nunca le fue bien en el amor. Fue mamá de una niña muy jovencita, pero la relación no funcionó y se separó. Tiempo después tuvo una nueva relación y otra hijita, pero la relación no prosperó. Un tercer intento por rehacer su vida fracasó años después de dar a luz a su tercer hijo. La mayor, de 14 años, y el menor de sus hijos, de 7, viven con sus padres y Jimena cuidaba de la segunda, de 10 años.
Conoció al albañil José Luis J.G., de 38 años. Se enamoraron y vivieron juntos un tiempo, pero Jimena se dio cuenta de que el hombre era muy celoso, inseguro y violento. Le contó a su hermana menor, Giovanna, que el hombre estallaba en ira si otro varón le hablaba siquiera y que no solo le propinó varias golpizas, sino que también controlaba todos sus pasos y le rompía su ropa para evitar que ella saliera.
Es por eso que, a principios del mes de julio, Jimena decidió separarse de José Luis y le pidió a Giovanna que se llevara a su hijita de 10 años porque no sabía cómo iba a reaccionar el hombre y temía por la seguridad de la niña. El 13 de julio, el albañil fue a hablar con ella y la golpeó salvajemente en la cabeza con algún objeto contundente. Jimena quedó inconsciente en su cuarto, con un sangrado interno en el cerebro hasta el 15 de julio. El hombre se quedó con ella y no la auxilió hasta que la hermana de la víctima fue a ver porqué no volvía a recoger a su hija y la encontró respirando apenas.
Jimena fue operada e internada en el hospital materno Germán Urquidi porque tenía 14 semanas de embarazo. Pensaron que iba a morir porque tenía un traumatismo craneoencefálico grave y múltiples hematomas en el cuerpo. Le pusieron un drenaje en el hueso parietal derecho. No respondía a estímulos verbales y permaneció sedada e intubada en terapia intensiva. Su estado empeoraba y ya se hablaba de desconectarla de los equipos, pero la presencia del bebé en su vientre impedía esa decisión. Súbitamente, como un milagro, sus signos vitales mejoraron y el 21 de agosto salió de terapia intensiva a una sala. Luego, el 10 de septiembre, fue trasladada al Hospital del Sur para su rehabilitación.
Jimena tiene parálisis en el lado izquierdo del cuerpo, puede hablar con alguna dificultad, pero se halla estable. El bebé está bien y ya cumplió 24 semanas de gestación. Sin embargo, Jimena necesita ayuda. Su hermana se encarga de cuidar a su hija de 10 años y no tiene recursos.
Se precisa pañales y, según prescripción médica, debe tomar de por vida el medicamento Levetiracetam de 500 mg para evitar las convulsiones y crema hidratante para la piel. Quienes puedan ayudar comprando estos medicamentos o donando pañales o crema, pueden comunicarse con el Área Salud de la Fundación Voces Libres al WhatsApp 67515544 o dejar los pañales y medicamentos en las oficinas de Chimba, avenida Cornelio Saavedra frente a la plaza Mariscal Braun (Micro Y le deja en la puerta).